Hace poco fui al cine a ver ‘La cara oculta’ y la historia consiguió conmoverme de tal manera que he considerado oportuno dedicarle mi columna de esta semana.
Se trata de una historia claustrofóbica, pasional y obsesiva dirigida por el director colombiano Andrés Baiz y protagonizada por los actores españoles Quim Gutiérrez y Clara Lago, de la que me sorprendieron gratamente su dotes interpretativos a pesar de resultar, en ocasiones, un tanto infantil para el papel otorgado.
La historia, contada, no puede parecer tan inquietante como visualmente: Adrián es un director de orquesta que empieza a trabajar para la Filarmónica de Bogotá donde se trasladará acompañado por su novia quien desaparecerá sin dejar rastro. Pero una vez sentada en la butaca la ‘impotencia’ no te permite dejar de prestar atención.
Es una de esas películas de las que cuanto menos se sabe más se disfrutan por eso simplemente os la recomiendo. No me gustaría ser yo la que desvele parte de la trama. Solamente os dejo unas declaraciones del director en las que asegura que “me gusta el thriller porque te permite agitar al espectador” y os puedo asegurar que es cierto. Aunque también os advierto de que no es apta para claustrofóbicos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario